
¿Cómo están logrando hacerlo posible?
1. Centros de distribución urbanos y dark stores
Estos espacios permiten tener productos clave cerca de las zonas de mayor demanda. Su ubicación estratégica en puntos neurálgicos de las ciudades permite preparar pedidos en tiempos muy reducidos, eliminando la necesidad de trasladar productos desde almacenes alejados. Además, al ser centros dedicados exclusivamente al ecommerce, pueden operar de forma más ágil y automatizada.
2. Plataformas tecnológicas de planificación y trazabilidad
Herramientas como los TMS (Transportation Management Systems) y software de ruteo permiten planificar rutas óptimas en cuestión de segundos, adaptándose a variables como tráfico, zonas de restricción vehicular o ventanas horarias de entrega. Al integrarse con GPS y sistemas de notificación, también facilitan la comunicación en tiempo real con el cliente.
3. Alianzas con operadores de última milla
Colaborar con empresas especializadas en la entrega final permite a los retailers y marketplaces escalar su cobertura sin asumir todos los costos operacionales. Estos partners suelen tener mayor conocimiento del terreno, flexibilidad operativa y tecnologías adaptadas al despacho rápido, lo que contribuye a mantener los niveles de servicio.
4. Integración omnicanal y stock distribuido
Contar con un sistema que integre inventario en tiempo real de tiendas físicas, bodegas regionales y centros de distribución permite redirigir el pedido al punto más cercano al consumidor. Esto no solo reduce los tiempos de entrega, sino que también optimiza el uso del inventario y disminuye los costos logísticos asociados al transporte.
Ejemplos que inspiran
Ya hay referentes en la región avanzando en esta dirección:
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Cornershop, nacida en Chile y hoy parte del ecosistema de Uber, ha demostrado que es posible entregar productos de supermercados y tiendas especializadas en cuestión de horas, incluso con integración en tiempo real con cadenas de retail locales.
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Rappi, la app colombiana que comenzó como un delivery de comida, ha evolucionado hacia una plataforma integral que entrega desde medicamentos hasta tecnología en menos de 60 minutos en zonas urbanas. Su estrategia de riders distribuidos por zonas estratégicas ha sido clave para su eficiencia.
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Mercado Libre, el gigante argentino del ecommerce, ha invertido millones de dólares en centros de distribución inteligentes y tecnología de última milla. Su servicio "Envíos Flex" permite que vendedores entreguen el mismo día en ciudades como Buenos Aires, Ciudad de México, Lima o São Paulo.
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Falabella, a través de su estrategia omnicanal, ha logrado que productos disponibles en tiendas físicas puedan ser entregados el mismo día gracias a su sistema de stock compartido y su red logística propia, especialmente en ciudades como Santiago o Bogotá.
Estos casos no solo demuestran que el modelo es viable, sino que también reflejan un cambio en la mentalidad empresarial: priorizar la cercanía con el cliente, invertir en tecnología y repensar la logística como un activo estratégico.
¿Entonces, promesa o realidad?
La promesa de entrega en el mismo día es real y posible, pero aún es un diferencial competitivo más que un estándar generalizado en LATAM. Las empresas que apuesten por este modelo deben entender que no se trata solo de mover productos rápido: implica rediseñar procesos, integrar tecnología y, sobre todo, colocar al cliente en el centro de toda la operación.
Si te gustaría comenzar a ofrecer entregas el mismo día, asegurando la calidad de estas, deja tus datos en el formulario de más abajo y estaremos en contacto.